Las basuras en Bellavista, un problema de nunca acabar

Los arrumes de basura reflejan el grado de contaminación al que a diario están expuestos los transeúntes y habitantes. / Javier Gutiérrez/VANGUARDIA LIBERAL

Conscientes del daño ambiental que ocasionan las basuras en las calles, algunos habitantes de Bellavista le atribuyen esta “falta de civismo” a la comunidad que reside en el sector y a otras personas que llegan de barrios aledaños.

“No sabemos qué más hacer, es un problema que se nos salió de las manos”, manifestó un afectado.

Agregó que hasta se han convertido en celadores para evitar que se arrojen desperdicios en las áreas comunes.

A esto, se le suma que algunos propietarios sacan sus animales para que hagan sus necesidades fisiológicas en las zonas verdes y no la recogen.

Uno de los puntos más críticos y que por años se ha caracterizado por ser un “botadero clandestino” es la vía peatonal, que la comunica al sector con la carretera antigua.

“Poco se puede transitar por las escaleras, porque es una inmundicia”, denunció un quejoso.

Ante este problema, los  preocupados habitantes solicitaron a las empresas de aseo que se tomen medidas radicales para sancionar a los infractores.

“Necesitamos que nos pongan atención, porque estamos cansados de ver que en vez de encontrar soluciones el daño ambiental se está acrecentando”, sostuvo, un habitante.

Debido a la acumulación de basuras, a este lugar llegan vacas, chulos y perros que hacen festín con los desperdicios.

Los habitantes hacen un llamado a las autoridades para que se realicen controles en la zona y de la misma forma limpieza frecuente.  
TOAMDO DE VANGUARDIA/02/09/2008